Milei sabe que está en esta lógica populista, y la elige para lograr lo que han hecho otros, en otros lugares del mundo; pero es un atajo muy peligroso para la democracia liberal. Su estilo vertiginoso lo lleva a tener pliegue y repliegue en sus discursos aforísticos, es decir en oraciones sencillas y cortas que intentan explicar parte de sus ideas centrales. Como lo es: “destruiría el Banco Central”. Hago consulta con el Dr. Google ¿qué países no tienen Banco Central?: Andorra,