¿Qué provocó el aumento del caudal y la turbidez del río Neuquén?

Las maniobras por la salida de funcionamiento de la central hidroeléctrica Planicie Banderita provocó que creciera el caudal de un sector del río Neuquén y que aumentara su grado de turbidez.

Desde la Autoridad Interjurisdiccional de Cuencas (AIC) se explicó que el inconveniente ocurrió “en dos de las tres unidades del banco de transformadores que elevan la tensión de salida a 500 Kv” el miércoles pasado. Por esto, el caudal del río Neuquén, aguas abajo del dique compensador El Chañar, es mantenido desde el vertedero de Portezuelo Grande.

El responsable del área hidrológica de la AIC, Julio Porrino, manifestó que la turbidez se generó por el paso del agua por el “caudal viejo” del río Neuquén, que estaba sin uso desde hace cuatro años. Porrino contó, también, que no tenía conocimiento de que este problema haya afectado la provisión del suministro eléctrico.

De acuerdo a la AIC, se espera que el elevado grado de turbidez “vaya disminuyendo con el transcurso de los días”, según la AIC.

Habitualmente, entre Portezuelo Grande y el compensador El Chañar se escurren unos 12 metros cúbicos de agua por segundo (m3/s), pero con esta nueva situación, en un día el caudal trepó a 110 m3/s. Puntualmente, hoy se registró un máximo de 150 m3/s, pero se aclaró que ese tramo puede contener hasta 230 m3/s.

De acuerdo a Duke, la empresa concesionaria que fue recientemente vendida a un fondo estadounidense, la falla es grave y se requerirán, al menos, diez días para remediarla, aunque desde la AIC detallaron que “no se han podido precisar completamente las reparaciones necesarias, por lo cual el tiempo indicado es el mínimo requerido”.

En este sentido, el presidente de la AIC, Elías Sapag, contó que apenas se notó el inconveniente la empresa dio aviso y personal de medio ambiente constató que el aceite que se derramó por la falla no llegó al caudal del río, sino que quedó en una “trampa”.