Djokovic aseguró que se siente «profundamente decepcionado»
El tenista serbio en un comunicado afirmó que espera descansar y recuperarse de lo que pasó en Australia.
El serbio Novak Djokovic aseguró estar “profundamente decepcionado” por la cancelación definitiva de su visado en Australia después de perder su recurso de apelación en un tribunal a esa decisión del Gobierno, por lo que el número uno del mundo se perderá el primer Grand Slam de la temporada por la decisión de la Justicia.
El afamado tenista, quien pretendía defender desde esta noche su título en el Abierto de Australia que se disputa en Melbourne, admitió mediante un comunicado que, debido a la decisión, “no podrá participar” en el certamen y que se siente “profundamente decepcionado”.
Una sala de jueces del Tribunal Federal decidió en la madrugada de Argentina de manera unánime que la cancelación del visado del tenista por parte del ministro de Inmigración, Alex Hawke, tiene base legal, y por lo tanto Djokovic fue deportado, con lo que se quedó sin la posibilidad de jugar el primer Grand Slam de la temporada en Melbourne.
El serbio, recluido desde ayer en un hotel, pidió en su escrito un tiempo para “descansar y recuperarse” antes de hacer nuevos comentarios al señalar que “respeta” la decisión de la justicia australiana luego de “cooperar” con las autoridades.
“Desafortunadamente durante las últimas semanas el foco de interés fui yo, espero que desde este momento nos podamos centrar en el deporte y el certamen que amo”, comentó Djokovic al desear suerte a los participantes y agradecer el apoyo a su familia y seguidores.
El serbio tenía previsto debutar mañana en la pista central Rod Laver Arena, estadio que le vio ganar el Abierto en nueve ocasiones, pero después de la decisión judicial la organización del certamen tendrá que sustituir al tenista número uno de la ATP.
Djokovic está empatado con Roger Federer y Rafael Nadal en cantidad de Grand Slam conquistados.Los tres ganaron 20 Abiertos. Con esta imposibilidad de jugar, el tenista serbio perdió su posibilidad de defender su título, superarlos y conseguir el récord.
Djokovic viajó el pasado 5 de enero a Melbourne con una exención médica por no estar vacunado y haber superado el contagio de Coronavirus en diciembre último, aunque a su llegada las autoridades de Inmigración le cancelaron el visado y lo detuvieron hasta su liberación el pasado lunes por una orden judicial al considerar que no fue tratado con “equidad”.
El ministro australiano volvió a anular el pasado viernes el permiso de entrada del balcánico al considerar que su presencia suponía un riesgo para el orden y podría avisar el sentimiento de los antivacunas. El deportista fue detenido ayer en un hotel por segunda vez previo a la vista celebrada hoy donde los jueces desestimaron la apelación de Djokovic contra la decisión gubernamental.
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