Fiel a su costumbre, el verborrágico Aníbal Fernández desató una fuerte polémica con la oposición al realizar un lúgubre pronóstico: el ministro de Seguridad anticipó que si la oposición gana las próximas elecciones habrá “calles regadas de sangre y muertos” debido a una inevitable represión que acompañaría un brutal ajuste económico. La sentencia fue una respuesta a otra frase que hizo mucho ruido. El expresidente Mauricio Macri señaló ante empresarios que comienza una campaña compleja don