El mayor problema para Bariloche son los cortes en la ruta 237
Lo dijo el intendente Gennuso quien afirmó que por ahora no hay desabastecimiento “pero pueden generarse algunos retrasos”.
El mayor problema para Bariloche son los cortes en la ruta 237
El intendente Gustavo Gennuso admitió que el mayor inconveniente para la ciudad es el prolongado corte de la ruta nacional 237 que bloquea el tránsito entre Bariloche y Neuquén.
“La mayor complicación es el corte de la ruta 237 que podría generar desabastecimientos”, dijo Gennuso ante la prensa al realizar hoy una evaluación del operativo de contingencia que se realizó ante el temporal de nieve.
El intendente luego precisó ante la consulta de “Río Negro” que “no hay riesgo de desabastecimiento pero todos sabemos que con el corte de esa ruta puede haber demoras”. El jefe comunal ayer mantuvo contacto con las estaciones de servicio que garantizaron tener reservas por el momento.
Gennuso puntualizó que tenía conocimiento que Vialidad Nacional “tuvo algún problema con las licitaciones por el mantenimiento de la ruta”.
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La ruta 237 fue cortada el sábado cerca de las 16 y muchos camiones, entre ellos el transporte que traía a Bariloche las garrafas del Plan Calor, quedaron varados en Piedra del Águila o Picún Leufú donde se realiza el corte viniendo desde Neuquén. Ayer la arteria solo fue habilitada un par de horas para descongestionar vehículos livianos varados pero no pasaron los vehículos de mayor porte.
Este lunes la ruta amaneció cortada al tránsito y se habilitó finalmente pasadas las 10.
Por esa situación tampoco circulan entre Bariloche y Neuquén colectivos de larga distancia. En la terminal de esta ciudad solo 12 personas quedaron varados y a la espera de que se reanuden los servicios.
Gennuso informó que a estas personas (entre ellos pasajeros que viajaban a Neuquén, Córdoba y Chile) se les ofreció ayer la cena y también un alojamiento pero no quisieron abandonar la terminal con la esperanza de la reanudación de los servicios.
El intendente destacó que en la ciudad “no hubo personas evacuadas ni situaciones de aislamiento, solo algunos abuelos que pidieron leña y otros que pidieron módulos alimentarios”.
Para la subsecretaria de Protección Civil, Patricia Díaz, “el operativo fue exitoso” en cuanto al despeje de calles e información interna de los servicios en la ciudad. El municipio dispuso de unos 160 empleados en tareas de calle este fin de semana.
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