El uso del apoyacabezas

Casi 4 de cada 10 personas desconocen como usar adecuadamente el “apoyacabezas” que constituye, junto con el cinturón de seguridad y el airbag, un sistema de seguridad pasiva.

Aún hoy existe una fuerte asociación del apoyacabezas como elemento de confort, más que de seguridad. El no saber como debe ser regulado, el conducir apoyando la cabeza sobre él, el restarle importancia a la fragilidad de las vértebras, músculos y nervios del cuello, son datos que sustentan esa postura.

La cabeza está delicadamente equilibrada sobre 7 vértebras que componen el cuello, en una relación de peso de 10 a 1, es decir como si una pelota de 5 kg., fuera sostenida por un palo de escoba. Basta un choque a 15 km/h., para que el movimiento brusco de la cabeza pueda llegar a producir daños crónicos o secuelas permanentes.

La lesión producida por el “latigazo cervical” , se produce como consecuencia del movimiento violento que realiza la cabeza hacia delante para luego retroceder con brusquedad en vaivén o zig-zag , como consecuencia de la aceleración y desaceleración que se registra durante una colisión y que puede provocar daños irreparable en el cuello.

Para su correcto uso:

1. Situarlo lo más cerca posible de la cabeza (aprox. 4 cmts.)

2. Elevarlo a la altura superior de la cabeza

3. Hacer coincidir su centro a la altura de los ojos

4. Asegurarse que quede bloqueado en esa posición

5. El ángulo de inclinación del respaldo del asiento no superior a 25°

6. Usar el cinturón de seguridad

María Eugenia Bertotti

ISEV (Instituto de Seguridad Vial)

BUENOS AIRES


Certificado según norma CWA 17493
Journalism Trust Initiative
Nuestras directrices editoriales

Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios

Exit mobile version