Proyectan que el superávit de la balanza energética pasará los US$7.000 millones este año

La balanza comercial energética, la ecuación entre las exportaciones y las importaciones de energía, ha sido un verdadero dolor de cabeza en los últimos años, con rojos que sumaron miles de millones de dólares. Tras un 2024 que cerró con signo positivo, para este año las proyecciones son más que alentadoras y según la consultora Aleph Energy se podría llevar a un superávit de más de 7.000 millones de dólares.

De acuerdo a al reciente informe trimestral de la consultora que dirige Daniel Dreizzen, en este año el «verde» de la balanza comercial del sector de la energía llegaría a los 7.050 millones de dólares, casi un 60% más que los 4.414 millones de dólares de superávit del año pasado que contabilizó Aleph Energy (que no contabiliza en su ecuación el combustibles de aviones y barcos que salen del país).

En informe enfatiza que la estrella central de la balanza comercial serán las exportaciones de petróleo. Esto no es una novedad, pues desde hace unos años son el fuerte exportador, pero según el estudio, en este 2025 podrían llegar a los 7.479 millones de dólares.

Para poner esto en dimensión, durante el año pasado las exportaciones de petróleo dejaron un saldo de 5.473 millones de dólares, con lo que la proyección marca un crecimiento del 36,6% en términos interanuales, con el anexado de nada menos que 2.000 millones de dólares.

Y esto calculado sobre la base de un barril de 75 dólares, que es un precio similar al que rige actualmente para el Brent.

Las exportaciones de gas natural también se proyecta que tendrán un crecimiento en este año, pero más acotado. Se pasará de los 662 millones de dólares del año pasado a 745 millones de dólares, un incremento del 12,5%.

Junto al gas se marca un incremento leve, pero alza en fin, en las exportaciones de productos derivados del gas natural como son el propano y butano.

Mientras que la ecuación de la balanza se completa con las importaciones, que claramente se espera que disminuyan en este año. En el caso del gas natural se espera que prácticamente caigan a cero, teniendo en cuenta el fin del contrato con Bolivia y sobre un nivel de 586 millones de dólares del año pasado.

Lo mismo sucede con la importación de gasoil para la generación térmica. Aquí se espera pasar de los 524 millones de dólares que destinaron a la importación el año pasado a 195 millones dólares, una baja del 62,7%, apalancada por el mayor aporte de gas que permitirá el ahora rebautizado Gasoducto Perito Moreno.

Aunque no hay buenas expectativas con la importación de gasoil para el transporte, que se espera que se incremente de 564 a 843 millones de dólares, un 49,6%, vinculado con una actividad económica que se espera se reactive luego de un 2024 de caída.