La planta arbustiva que crece en otoño: fácil de cuidar, produce flores azuladas y es muy ornamental
Es una especie de rápido crecimiento y no requiere demasiada atención. Cómo cuidarla.
La Duranta erecta, también conocida como duranta, es una planta arbustiva de gran valor ornamental debido a sus vistosas flores azuladas y su fácil mantenimiento. Originaria de América tropical, se ha convertido en una opción muy popular en los jardines argentinos gracias a su resistencia y versatilidad.
La duranta puede alcanzar alturas de entre 2 y 4 metros, con un follaje denso y brillante que la hace ideal para la formación de cercos vivos o como planta aislada. Sus pequeñas flores en tonos azul violáceo se presentan en racimos y atraen a polinizadores como abejas y mariposas, lo que contribuye a la biodiversidad del entorno.
Además, en otoño y primavera, esta planta produce bayas anaranjadas que agregan un atractivo adicional al paisaje, aunque es importante destacar que estas frutas no son comestibles y pueden ser tóxicas si se ingieren.
¿Cómo cultivar la duranta?
Una de las grandes ventajas de este arbusto es su facilidad de cultivo. Se adapta a diferentes tipos de suelo, aunque prefiere los bien drenados y ricos en materia orgánica. Tolera tanto el pleno sol como la semisombra, aunque su floración será más abundante si recibe una buena cantidad de luz solar.

El otoño es una excelente época para plantar la duranta, ya que permite un buen desarrollo radicular antes de la llegada del invierno. Se recomienda un riego moderado, evitando encharcamientos, y una poda regular para mantener su forma y estimular nuevas floraciones.
Ideal para jardines urbanos y rurales
Gracias a su rápido crecimiento y su capacidad de adaptación, la duranta es una alternativa perfecta tanto para jardines urbanos como rurales. Se utiliza en bordes, macizos florales o como seto, brindando color y estructura durante todo el año.
Además, es una planta resistente a plagas y enfermedades, aunque en climas húmedos puede ser susceptible al ataque de pulgones y cochinillas, que pueden controlarse con métodos ecológicos como el uso de jabón potásico o aceite de neem.
Incorporar la duranta en el diseño del jardín no solo garantiza belleza y frescura, sino que también aporta beneficios ambientales. Su capacidad para atraer polinizadores ayuda al equilibrio ecológico y favorece la regeneración de otras especies vegetales.
Con cuidados mínimos y una gran capacidad ornamental, la Duranta erecta se posiciona como una de las mejores opciones para quienes buscan un arbusto vistoso y de fácil mantenimiento en Argentina.
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