Luces de alarma para octubre
El principal reto para el gobierno es sin embargo la inflación. Los economistas advierten sobre el impacto de la aceleración de los precios en el índice de enero.
Con un Estados Unidos convaleciente y una Europa desconcertada y medrosa, Xi Jinping ha sido como se preveía la estrella del Foro de Davos, que sesionó esta semana de manera virtual y en el que tuvo su participación, el jueves, Alberto Fernández. Allí el presidente pudo descansar en un tipo de discurso que salva todas las diferencias internas en la coalición oficialista, casi un oasis. Dijo que “el imperativo moral” del planeta es hoy priorizar “a los últimos, los descartados, los invisibilizados” y que “la solidaridad debe ser el nuevo nombre de la paz social”.
Contra lo que puede suponerse, las bellas palabras empleadas por Fernández no sonaron huecas en esta edición del Foro Económico Mundial, que reunió a una elite económica mundial preocupada por el impacto global del covid en términos de desigualdad. El lunes, en la jornada de apertura, la reconocida ONG británica Oxfam advirtió que la agudización de las desigualdades podría conducir a un estallido social en sociedades que vienen soportando el agobio de las restricciones impuestas para contener el avance de la pandemia.
El informe de Oxfam no podía ser más generoso con el presidente Fernández: recupera las propuestas de economistas como Thomas Piketty en favor de un aumento de impuestos a las grandes fortunas que ayude a mitigar las desigualdades y cita el caso del gobierno argentino, que acaba de reglamentar el impuesto a la riqueza con el que busca recaudar de los bolsillos de unos 12.000 contribuyentes US$ 3.000 millones extras este año.
El mundo no ha seguido el ejemplo argentino y seguramente no lo hará, pero sí está decidido a bajar tasas de interés, flexibilizar la política monetaria y fiscal y reforzar los paquetes de estímulo como el del gobierno de Joe Biden, que busca la aprobación en el Congreso de su paquete de US$ 1,9 billones para relanzar la economía estadounidense. Cuando los hechos cambian, yo cambio de opinión, ha dicho Keynes. Estamos ante un mundo conceptualmente keynesiano.
En los sectores de menores ingresos cae como en ningún otro (-6,5%) el índice de confianza del consumidor de la UTDT, un indicador clave sobre la economía real.
Con una economía postrada, las herramientas con las que cuenta la Argentina para la recuperación son sin embargo escasas. El FMI difundió esta semana una corrección de sus perspectivas económicas para este año, un trabajo en el que además coincide con la sensibilidad de Davos sobre la dimensión social de la pandemia. Mejora en 0,5 puntos las expectativas de crecimiento para la región y en 0,8 puntos en los casos de Brasil y México, sus dos principales economías, pero reduce 0,5 puntos las perspectivas en el caso argentino, que según el informe crecerá 4,5% en 2021. Menos de la mitad del derrumbe de 11 puntos de 2020.
La directora del FMI Kristalina Georgieva habla el lenguaje del ministro Martín Guzmán. Y la llegada de Yanet Yellen al Tesoro de los Estados Unidos ha entusiasmado a algunos funcionarios. Hay un eslabón personal -su marido- que incluso la une a Guzmán a través de Joseph Stiglitz, mentor y favorecedor del ministro (aunque los sajones reniegan de las adscripciones personales). Georgieva y Yellen son mujeres decisivas para la negociación de la deuda con el FMI, que invariablemente contempla un ajuste de las cuentas fiscales. El ministro dijo esta semana que espera poder llegar a un acuerdo con el organismo antes de mayo, antes de un vencimiento con el Club de París. Otras voces pretenden postergar el acuerdo a después de las elecciones. Hay una tensión larvada en el oficialismo sobre esta cuestión.
El principal reto para el gobierno es sin embargo la inflación. En los últimos días fueron diversos los economistas que advirtieron sobre el impacto de la aceleración de los precios en el índice de enero, que superaría el 4% de diciembre. La encuesta publicada esta semana por la UTDT marcó una suba de 5 puntos, a 45%, en la expectativa de inflación para el año. Especialmente en los sectores de menores ingresos, entre los que también cae como en ningún otro (-6,5%) el índice de confianza del consumidor, un indicador clave sobre el estado de la economía real. Luces de alarma para octubre.
El principal reto para el gobierno es sin embargo la inflación. Los economistas advierten sobre el impacto de la aceleración de los precios en el índice de enero.
Con un Estados Unidos convaleciente y una Europa desconcertada y medrosa, Xi Jinping ha sido como se preveía la estrella del Foro de Davos, que sesionó esta semana de manera virtual y en el que tuvo su participación, el jueves, Alberto Fernández. Allí el presidente pudo descansar en un tipo de discurso que salva todas las diferencias internas en la coalición oficialista, casi un oasis. Dijo que “el imperativo moral” del planeta es hoy priorizar “a los últimos, los descartados, los invisibilizados” y que “la solidaridad debe ser el nuevo nombre de la paz social”.
Registrate gratis
Disfrutá de nuestros contenidos y entretenimiento
Suscribite desde $1500 ¿Ya estás suscripto? Ingresá ahora
Comentarios