Macri recibe a los gobernadores con el objetivo de mejorar la gestión

El martes, Mauricio Macri volverá a sacarse una foto con la mayoría gobernadores provinciales al firmar del Compromiso Federal para la Modernización del Estado. El mandatario de Río Negro, Alberto Weretilneck, negó categóricamente a este diario que se vaya a promover recorte de personal en la administración pública. Aseguró, además, que en el marco del compromiso para reducir el rojo fiscal, firmado hace un mes con Nación, la provincia terminará este año con un “déficit mucho más chico y controlable”.

“De ninguna manera se van a despedir empleados públicos. Hasta ahora, no hemos firmado ningún acuerdo con Nación que involucre recorte de personal”, dijo ayer Weretilneck a Río Negro.

Según informaron desde el Ejecutivo, el Compromiso de Modernización, que los mandatarios firmarán este martes, promueve la desburocratización y transparencia de la administración pública, la “inclusión digital”, la “jerarquización” del empleo público, capacitación y el impulso de metas de “gestión por resultados”. El director de Relaciones Institucionales del ministerio de Modernización, Guillermo Baistrocchi, dijo a este diario que la Nación “proveerá los servicios y tecnología para hacer la digitalización que corresponda y el compromiso, para las provincias que tengan necesidades de financiación para avanzar con los planes de modernización, de facilitar con los organismos multilaterales ese financiamiento”.

El funcionario también negó que se vaya a controlar el empleo público: “Para darle potencia a la noticia algunos aparecieron con esto de que Macri les pide que controlen el empleo. Definitivamente no tiene que ver con reducir el personal”, aseguró. Hasta ayer, estaban confirmada la asistencia de la gran mayoría de los gobernadores, con la excepción de los fervientes opositores de La Pampa, Formosa y San Luis.

A pesar de que no habrá recortes, Weretilneck recordó, sin embargo, la firma del pacto de responsabilidad fiscal suscrito en marzo con la Nación. “Se planteó en ese momento que no se sume más personal a la administración pública, con las salvedades que ponemos siempre los gobernadores en ciertos sectores, que es muy difícil no destinarles personal, como policía, educación y salud pública. No hay que afectar los servicios esenciales del Estado”, aclaró.

El gobierno nacional tiene como uno de sus objetivos económicos principales reducir el déficit fiscal. En un año electoral, ese objetivo resulta complicado: se registró en febrero un incremento del déficit del 46% respecto al mismo mes del año pasado. El Ejecutivo aceleró el gasto público social, en jubilaciones, educación y vivienda y obra pública, así como las transferencias a las provincias. El pacto de responsabilidad llama a los distritos a alcanzar la optimista meta del déficit cero para 2019.

¿La provincia está cumpliendo con el compromiso, se puede bajar el déficit en un año electoral?, se le preguntó al gobernador.

“Sí, de hecho redujimos un 20 por ciento el presupuesto del año pasado, y las paritarias las estamos manteniendo en el 18 o 19%. Con la paritarias en esos niveles y la reducción del presupuesto vamos a poder bajar el déficit de manera importante. El primer trimestre del año terminó superavitario; hay que considerar que en marzo aún no estaban cargados los aumentos salariales. Respecto del año pasado hay un superávit importante, el punto es que en cuando en abril ya carguemos las paritarias, ese superávit se deteriora. No digo que vamos a terminar el año con superávit, pero sí con un déficit mucho más chico y absolutamente controlable”, prometió Weretilneck.

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