En Occidente industrializado hoy es “de derecha” simpatizar con obreros perjudicados por la globalización y “de izquierda” solidarizar con elites ilustradas. Lo mismo que en otras partes del mundo, en la Argentina “derecha” es una mala palabra. Para quienes dominan las industrias culturales, entre ellas la de los medios de difusión masiva, es sinónimo de mezquindad, crueldad e indiferencia ante el sufrimiento ajeno. Es por tal motivo que los candidatos electorales del kirchnerismo nos