Desarrollar el autocontrol, el entusiasmo, la empatía, la perseverancia y la capacidad para motivarse a uno mismo,son susceptibles de aprenderse y perfeccionarse a lo largo de la vida. Si los argentinos tenemos tan deficiente desempeño cuando se mide el Coeficiente Intelectual (CI) -ejemplo de ello son las Pruebas PISA-, podemos deducir lo mal que nos iría si nos sometiéramos a un examen de Inteligencia Emocional (IE), aspecto humano del que se ha empezado a hablar hace pocas décadas.