Por una vez, las instituciones democráticas del país estuvieron a la altura y se alinearon para resistir el improvisado y estrambótico intento de golpe de Estado. La imagen invita al engaño. Un hombre está sentado en un sofá de cuero o cuerina negra. Lleva una chaqueta sport azul y ojea -con lo que a la distancia y en el preciso momento de la instantánea parece despreocupación- una revista. Abstraído, ajeno, en apariencia, a lo que ocurre a su alrededor. A su lado, un hombre mayo