Fueron las tres culturas monoteístas (judíos, cristianos y musulmanes) las que confinaron las relaciones sexuales a la reproducción. En el mundo grecorromano las relaciones sexuales entre varones eran masivas, habituales, consagradas incluso por la religión, el arte, la política y la vida militar. Nadie pensaba entonces que eso era “homosexualidad”. Durante los dos mil años que van de la guerra de Troya a la caída del imperio romano las relaciones sexuales no se pensaban de manera par