La violencia motivada moralmente, explican Fiske y Rai, se basa en la experiencia emocional. No hay nada racional en la violencia que “repara” un daño previo o venga un crimen. La idea común sostiene que la moral nos enseña a ser más buenos y menos violentos, pero hay importantes investigadores en el campo de las ciencias cognitivas que demuestran que sucede lo contrario: somos violentos a causa de nuestro ideal moral. El problema parece ser que no podemos intentar hacer el bien sin d