CALF ganó más de 3.000 millones de pesos pero igual traslada la deuda a sus clientes
En la factura de la cooperativa hay un cargo para cubrir el pago por la deuda con Cammesa por la compra de energía, a pesar de que dinero no le falta.
El balance que el Consejo de Administración de la cooperativa CALF pondrá a disposición de sus socios en una asamblea que aún no tiene fecha, muestra que la empresa tuvo entre julio de 2023 y junio de 2024 una ganancia neta superior a los 3.000 millones de pesos. Por ahora, ese resultado positivo se está invirtiendo en nuevos negocios de futuro incierto, como la prestación de servicios petroleros, sin aliviar a los clientes de la pesada carga de la deuda por la compra de energía en la boleta de las familias, los comercios y las industrias.
La ganancia bruta de CALF es muchísimo mayor: 16.000 millones de pesos pero este resultado inciden cuestiones financieras, principalmente relacionadas con la inflación (el “resultado por exposición al cambio en el poder adquisitivo de la moneda”, al que llaman Recpam). Sin esta distorsión, el resultado sigue siendo positivo pero por los 3.000 millones mencionados.
Pudo tener semejante ganancia en una organización que es altamente onerosa (casi un cuarto de lo que cobra va a parar a sueldos de los empleados y honorarios de sus directivos) porque su tarifa es muy alta, una media de 133,5 pesos por kilovatio hora (kWh) cuando en general las distribuidoras tienen precios en torno de los 106 a 115 pesos por kWh.
La tarifa media de la Cooperativa de Electricidad Bariloche, por caso, es de 96 pesos el kWh.
CALF: El tamaño de la billetera sí importa
Una billetera virtual y un negocio de internet por fibra óptica son los dos grandes proyectos que tiene la actual conducción encabezada por Marcelo Severini con mano férrea del Tesorero, Manuel Cuesta, que contrató con la empresa de su hija el rediseño de la marca y con otra de él mismo parte de la publicidad callejera.
CALF tiene un negocio que (en parte) es la envidia de las empresas que tienen la misma prestación en la región: el monopolio de la distribución de electricidad en un territorio alto en su demografía y acotado en su expansión, una regulación más política que técnica y una administración a la que los accionistas, que son los socios de la cooperativa, no le recrimina demasiado.
El punto débil del negocio son las tomas y los barrios sin regularizar, donde es casi imposible cobrar.
CALF: Te debo, les cobro
Como muchas otras distribuidoras de electricidad, la cooperativa de la ciudad de Neuquén acumuló deuda por la compra de energía con Cammesa (Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico SA), que es la que vincula a los generadores y transportistas con las empresas minoristas, como CALF.
El argumento para este incumplimiento fue el atraso tarifario: con ingresos planchados, las distribuidoras se financiaban dejando de pagar por la energía que vendían (y facturaban).
Pero la cooperativa neuquina nunca tuvo ese problema. De todos modos se endeudó. ¿En cuánto? Es un misterio pero hace dos años se hablaba de 5.164 millones de pesos.
El acuerdo al que llegó con Cammesa supuso un pago inicial de 289.620.516 pesos.
“CALF normalizó la deuda con Cammesa, firmando un plan de pago de 96 cuotas, venciendo la primera el 25/03/24 y la última el 25/02/32, a tasa fija. Esta regularización financiera permitirá a CALF un proceso de afianzamiento en su negocio principal”, se informa en la memoria y el balance certificado por el contador Rubén Oyhanarte.
Pero en vez de asumir la deuda con fondos propios, lo que hizo el Consejo de Administración de CALF fue trasladárselas a sus clientes. Es decir: les cobró dos veces lo mismo, con la aprobación de la municipalidad de Neuquén, que es la dueña del servicio.
Así, todos los meses aparece en la factura de electricidad un cargo con la leyenda “ART 1,2,3 ACUERDO CALF/CAMMESA”. (Hay otro cargo, “ART 6 CONTRIBUCION NUEVO CAN”, que es para el basural, llamado Complejo Ambiental Neuquén).
Diario RÍO NEGRO intentó obtener la palabra de la conducción de CALF pero fue en vano: como en otras oportunidades decidieron no dar a conocer a la opinión pública sus explicaciones sobre el tema.
CALF quiere se petrolera y constructora
El equipo que encabeza Marcelo Severini también quiere que CALF maneje una empresa constructora pero orientada a la obra pública.
Así lo describen: “Dentro de las unidades de negocios proyectadas se encuentra la posibilidad de realizar obras de infraestructura básica relacionadas con la red eléctrica y también aquellas vinculadas con todo tipo de infraestructura urbana como redes de agua, cloacas cordón cuneta gas y otras”.
Entraría así al exclusivo club de la obra pública.
Pero además pretende hacer pie en otro negocio, el más rentable de la economía neuquina, el petrolero. Es algo que está en análisis: “la conveniencia de realizar servicios vinculados con la actividad petrolera”.
“En la actualidad se prestan servicios en la tierra de Vaca Muerta, una de las mayores formaciones de petróleo y gas no convencional del mundo y con relevancia en el panorama energético mundial, en el que se proyecta una actuación de la cooperativa con un rol más activo en el desarrollo de la región en búsqueda del beneficio para la comunidad”, anunciaron.
Una mutual además de una cooperativa
“CALF trabaja en la idea de fundar una mutual con la posibilidad de nuclear a 100.000 potenciales socios porque entiende la necesaria y profunda posibilidad de dar mayor respuesta a la sociedad neuquina bajo el concepto de ‘ayuda mutua’ y con el fin de prestar diversos servicios que no brinda ni podría brindar por su objeto social”, se anuncia en la memoria y balance preparado por su Consejo de Administración.
Se llamará Mutual CALF y entre las difusas funciones aparece la de crear una “economía capaz de dar respuesta a sus futuros asociados y asumir principios y valores mutualistas, que se diferencie de los servicios prestados por CALF, pero que pueda ofrecerse a los usuarios de la cooperativa y también a empleados de la misma”.
Diario RÍO NEGRO cerró los comentarios de esta nota para evitar la propagación de discursos de odio, como establece en sus directrices editoriales.
El balance que el Consejo de Administración de la cooperativa CALF pondrá a disposición de sus socios en una asamblea que aún no tiene fecha, muestra que la empresa tuvo entre julio de 2023 y junio de 2024 una ganancia neta superior a los 3.000 millones de pesos. Por ahora, ese resultado positivo se está invirtiendo en nuevos negocios de futuro incierto, como la prestación de servicios petroleros, sin aliviar a los clientes de la pesada carga de la deuda por la compra de energía en la boleta de las familias, los comercios y las industrias.
Registrate gratis
Disfrutá de nuestros contenidos y entretenimiento
Suscribite desde $1500 ¿Ya estás suscripto? Ingresá ahora
Lo más comentado
Necrológicas de hoy, miércoles 4 de junio de 2025