Ramos Mexía sorprendió con su convocatoria a elecciones para ampliar mandatos y luego las suspendió

Nueve municipios rionegrinos votarán el 27 de abril para renovar parcialmente sus Concejos y, hace unos días, Ramos Mexía se sumó para esa misma jornada con un llamado a elecciones para elegir convencionales, que deberán reformar su Carta Orgánica.

El texto de las reformas no se conocía todavía, pero se advertía el propósito del intendente Nelson Quinteros de habilitar nuevos mandatos, actualmente limitados a dos.

El viernes, la Junta Electoral de Ramos Mexía postergó su elección, sin nueva fecha, frente a las evidentes irregularidades.

La convocatoria formal del proceso se confirmó con el ingreso en el ministerio de Gobierno de la adhesión al sistema electoral, es decir, el financiamiento de la votación, como ya firmaron las otras intendencias hace varias semanas.

Esta nota ingresó el 20 de marzo. Después de la sorpresa, la primera reacción gubernamental estuvo en los obstáculos para sostener la convocatoria, especialmente por el incumplimiento de los plazos. Se advertía que cualquier cuestionamiento en la Justicia Electoral determinaría su suspensión.

La semana pasada, el gobernador Alberto Weretilneck recibió al intendente Quinteros. La audiencia fue comunicada con anuncios de obras, pero, posiblemente, el cuadro electoral fue motivo de evaluación.

El actual jefe comunal asumió en el 2019, utilizando el sello del PJ, y reasumió en el 2023, con su partido Todos por Ramos, adhiriendo a JSRN.

El viernes concluía el plazo para la presentación de las listas de convencionales. En esa ocasión, la Junta Electoral resolvió la postergación de la elección, anticipando que la nueva fecha se informará. Así, este proceso para el 27A quedó suspendido.

La Junta Electoral fue conformada por la ordenanza N° 235, del 6 de marzo. Su presidenta, Melisa Milatich firmó la postergación, solicitada por el apoderado del PJ, Walter Pranao. El oficialismo tiene mayoría en la Junta, por lo cual, la aceptación al pedido peronista responde a un análisis interno de las dificultades legales de la convocatoria.

La convocatoria sorprendió a las autoridades provinciales y judiciales, a pesar de que la ordenanza N° 234 del llamado tiene fecha del 10 de diciembre del 2023, fijando -llamativamente- la votación para el 27 de abril del 2024, que fue el domingo luego pactado por la Provincia con los intendentes para sus elecciones, aunque esa definición fue posterior. En enero, el gobierno rionegrino recién confirmó el proceso para abril.

La norma de Ramos tiene la firma de los dos concejales oficialistas, Belén Colihuinca (que preside) y Facunco Guaquimil mientras no figura Silvana Morales, de Vamos con Todos.

La Justicia Electoral Provincial no estaba notificada, que interviene frente a cuestionamientos a las resoluciones locales, pero, además, actúa en las eventuales alianzas y la actualización de los padrones electorales.

En sus fundamentos, la ordenanza que dispone la elección de los 15 convencionales recuerda que la Carta Orgánica fue aprobada en el 2012 y reafirma que la misma debe “representar los tiempos que corren” y, entre los puntos para modificar, menciona que la misma “prevé un número de habitantes para el llamado a planta permanente” y esa situación “lesiona los derechos de los trabajadores estatales”.

Agrega como “necesaria la revisión del plazo de mandato de las autoridades electas, en el entendimiento de la aplicación de políticas públicas, de los objetivos trazados y la consecución de los mismos” y se anticipa la “consideración de un mandato mayor que el previsto que posibilite para el ciudadano, la consideración en las labores efectuadas y la continuidad de lo realizado.”

Con la postergación, se reafirma que el 27A votarán solamente nueve municipios que deben renovar concejales. Tres de la Región Sur (Maquinchao, Sierra Colorada y Jacobacci), tres del Valle Medio (Pomona, Darwin y Belisle), dos de la zona Andina (Pilcaniyeu y Ñorquinco), y el restante del Alto Valle (Godoy).