Festejar el Día de las Infancias también se puede realizar de manera saludable

Es una fecha que entre celebraciones y paseos se suele descuidar la buena alimentación de los peques de la casa. Los nutricionistas dan una guía para mantener la alimentación saludable y no morir en el intento.

Ya comenzaron los festejos por el Día de las Infancias y hay de todo tipo de propuestas para celebrar a los peques de la casa. Habrá regalitos, salidas, paseos y muchas familias querrán armar un menú especial para los niños y niñas de la familia. Y se sabe que ellos, si se les da la posibilidad de elegir el plato con el que se sentarán a la mesa será aquel que sea adornado por una hamburguesa con papas fritas, una pizza, panchos y la lista podría seguir. En este punto es que los nutricionistas de Neuquén alertan: «Ayudarlos a sostener una buena alimentación es el mejor regalo que le podemos hacer a nuestros hijos e hijas».

«Comer bien, tomar agua, hacer actividad física y regular la televisión y uso del celular, son algunos hábitos que los niños deben aprender desde pequeños para llevar una vida sana. No hay que esperar a que nuestros hijos tengan problemas de salud o sobrepeso. La promoción de hábitos sanos es sin duda la mejor apuesta de futuro. El juego y la actividad física, junto a una alimentación saludable, son los pilares de una vida saludable y el mejor regalo», aseguró el nutricionista Samuel García.

En la vorágine del día a día, las familias intentan resolver como pueden los momentos de alimentación. A esto se suma que la gran mayoría de los niños y niñas no aceptarán un plato de brócoli o de berenjena o de lentejas o un puré de zapallo. Pero nada es imposible, sostienen los especialistas porque confirman que desde los primeros meses de la ingesta de alimentos sólidos de los hijos e hijas se puede ir formando la conducta de una alimentación saludable.

«Una alimentación variada garantiza que niños y niñas obtengan los nutrientes que necesitan. Por eso, es importante motivarlos a probar alimentos de todos los grupos. El gusto de los pequeños es cambiante y poco a poco aceptarán las verduras y el pescado que al principio no querían ni ver«, agregó el profesional. Solo es cuestión de paciencia, constancia y de empezar a mezclar los alimentos de diversas formas hasta encontrar la manera de armar un plato saludable que el niño «devore» con gusto.

Si los padres y madres requieren ayuda en esta materia, existe una guía de alimentación para niños y niñas a partir de los dos años que sugiere incorporar diariamente alimentos de todo tipo y realizar 30 minutos de ejercicios al menos por día; consumir legumbres y cereales, preferentemente integrales, batatas, papas y cholo y no olvidar nunca que es necesario que los niños ingieran agua durante todo el dia.

Los nutricionistas recomiendan además, que se acostumbre a ingerir unidades de frutas de tipo variado cada uno de los días de la semana. Los lácteos son vitales también y es necesario reducir la ingesta de bebidas azucaradas y el exceso de sal.


Otros tips para tener en cuenta que aportan los profesionales

Limitar al máximo la comida rápida y productos ultraprocesados.

• Es importante hacer un buen desayuno.

Establecer horarios fijos para cada comida, hay que acostumbrar el cuerpo a horarios y limitar el picoteo.

Compartir al menos una comida familiar, es una oportunidad de convertirnos en un modelo de hábitos para nuestros hijos e hijas.

La jarra de agua no puede faltar nunca en la mesa familiar.

No obligar a terminar el plato, si el niño o la niña dice que está lleno, hay que respetarlo.

El juego y la actividad física son aliados para el buen funcionamiento del organismo. La actividad física previene el sobrepeso en niñas y niños, incrementa su rendimiento escolar e incluso su estado de ánimo.

El tiempo que pasan con los celulares, tablet o viendo televisión se lo están quitando a otras actividades necesarias y mucho más saludables. Conviene pactar con ellos un tiempo máximo para las nuevas tecnologías y buscar otro tipo de actividades para disfrutar del tiempo libre.

Para generar hábitos saludables es necesario potenciar la parte positiva. Frases como «no comas galletitas», «no picotees», solo producen frustración y ansiedad en los niños y niñas. En cambio, otras como «vamos a dar un paseo», estás manzanas están ricas», reforzarán los hábitos que se quieren crean en los peques.



Certificado según norma CWA 17493
Journalism Trust Initiative
Nuestras directrices editoriales

Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios

Exit mobile version