Una biblioteca popular de Bariloche busca estrategias para subsistir sin aportes

Sin aportes estatales y con un fuerte incremento de las tarifas de los servicios públicos, las bibliotecas populares surfean la crisis e intentan sobrevivir manteniéndose a flote. Es el caso de la Biblioteca Aimé Painé del barrio Virgen Misionera que lanzó un bono contribución para sumar aportes.

«El mandato de la comisión directiva anterior venció en diciembre y nos llevó unos meses poder regularizar: reunir la documentación y los balances para convocar a una asamblea y elegir las nuevas autoridades», explicó Eli Marotta, voluntaria de la biblioteca e integrante de la comisión directiva desde hace cuatro años.

Las nuevas autoridades se eligieron el primero de junio y evalúan distintas herramientas para poder subsistir con la atención de los socios y la realización de talleres y actividades de promoción de la lectura.

Marotta indicó que, en los últimos años, la biblioteca se sostiene con aportes estatales de la Comisión Nacional Protectora de Bibliotecas Populares (Conabip), el gobierno provincial y municipal. «Durante este año, aún no hemos recibido ningún aporte que se gestiona presentando las rendiciones. De modo que económicamente estamos muy ajustados por la situación: solo de gas nos ha llegado una boleta de 56 mil pesos. No hablar de la luz. Los ingresos que recibimos son a cuentagotas«, señaló.

Puso como ejemplo que, todos los años, la Conabip entrega un aporte a las bibliotecas para participar de la Feria del Libro en Buenos Aires y comprar libros a las editoriales, al 50%. Este año ese aporte brilló por su ausencia. «No fuimos los únicos. Hubo muchas bibliotecas que no recibieron ese subsidio. Por suerte, tenemos una buena dotación de libros. En los últimos años, además de los libros para adultos, nos hemos ido especializando en literatura infantil», mencionó.

La biblioteca tiene 300 socios activos. No solo de Virgen Misionera sino de los barrios alrededor. La nueva comisión directiva decidió lanzar un bono contribución que tiene un valor de 5.000 pesos. Sortea un ascenso para cuatro personas al cerro Otto. Quienes estén interesados pueden adquirirlo al (2945) 15902896, por el Facebook (Biblioteca Aime Paine BRC) o Instagram (Bibio Aime Paine BRC).

«Por otro lado, lanzamos una campaña para que los socios se pongan al día con las cuotas. Actualizamos el valor que era de 500 pesos en 2023. Desde el primero de junio, es de 1000 pesos mensuales«, dijo Marotta.

Resaltó que hoy, tampoco cuentan con bibliotecarias pese a la ley provincial que garantiza el funcionamiento de las bibliotecas populares, a través de la designación de personal. «Teníamos dos bibliotecarias, pero en marzo fueron trasladadas a otras bibliotecas. Tras la asamblea del primero de junio, enviamos la documentación para pedir que vuelvan, pero hasta ahora no tenemos respuestas«, manifestó.

Esta situación afecta gravemente ya que hoy la biblioteca depende de la atención de los voluntarios durante unas pocas horas al día. «Con la atención de las bibliotecarias, entre 8 a 10 horas por día, podemos organizar talleres, charlas y todo tipo de actividades. Sabemos que la bibioteca es un lugar de encuentro. Hay mucha gente sola que se suman a las propuestas de talleres o simplemente acuden en busca de un libro y tienen la posibilidad de encontrarse con otros socios. Es un lugar contrahegemónico», afirmó.