Vacunas del calendario nacional: ya están disponibles en los 36 hospitales de Río Negro

Desde el Gobierno de Río Negro, lanzaron oficialmente la convocatoria a toda la población a vacunarse en los 36 hospitales y 189 centros de salud distribuidos en la provincia.

Desde esos centros asistenciales, los trabajadores de salud trabajan activamente para que todas las personas puedan acceder y de esta manera estar protegidos contra enfermedades prevenibles.

«Vacunarse es un acto de responsabilidad individual y colectiva. Quienes no reciben las vacunas correspondientes pueden contraer y transmitir enfermedades, poniendo en riesgo no solo su propia salud, sino también la de toda la comunidad», plantean para concientizar a la población.

Aseguran que es especialmente riesgoso en el caso de los sectores más vulnerables, como los bebés menores de un año que aún no han completado su esquema de vacunación, las personas gestantes e inmunodeprimidas, quienes por distintas enfermedades o tratamientos tienen defensas bajas.

De esta manera, para el Ministerio de Salud de Río Negro, vacunarse es un acto de solidaridad que protege a todos y es necesario que los ciudadanos revisen constantemente y actualicen su carnet de vacunación.

En todos los casos, para acceder a las aplicaciones en los centros de salud u hospitales, las personas deben concurrir con DNI y el carnet de vacunación, para que el personal de salud de turno, pueda asesorar sobre qué vacunas corresponden aplicar en cada caso.

Balancearon que durante el año pasado, en todo el territorio de Río Negro se aplicaron 502.000 dosis del Calendario Nacional. Así, se garantizó el acceso gratuito y equitativo a la inmunización de las comunidades.

Las vacunas de calendario: año por año

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Las primeras dosis son las que se aplican antes del año de vida del niño; a los dos, tres, cuatro, cinco y seis meses para prevenir la poliomielitis, coqueluche, neumonías, diarreas por rotavirus, meningitis. Los mayores de seis meses también se deben aplicar la vacuna para la gripe.

Esta es la etapa de mayor susceptibilidad ya que es mayor la posibilidad de que el bebé se enferme, si bien puede adquirir anticuerpos o defensas de su mamá, necesita de las vacunas.

Al año de vida, se aplica el refuerzo de neumococo, la vacuna para prevenir sarampión, rubéola y paperas y una única dosis contra la hepatitis A.

Luego a los 15 meses (1 año y tres meses), los nenes deben recibir el refuerzo de meningococo conjugada tetravalente y la primer dosis contra la varicela. Entre los 15 y 18 meses (año y medio) se aplica la quíntuple (o pentavalente).

En la etapa escolar, a los cinco años, los chicos deben recibir las vacunas de refuerzo para prevenir poliomielitis, sarampión, rubéola y paperas. La triple bacteriana celular, contra la difteria, el tétanos y la tos convulsa; finalmente la que previene varicela.

A los 11 años, deben colocarles una dosis de refuerzo de la vacuna antimeningococcica, una dosis de la vacuna VPH en ambos sexos y un refuerzo de la vacuna triple bacteriana acelular.